Kristel Candelario, de 31 años, fue sentenciada a cadena perpetua tras la muerte de su hija de 16 meses, Jailyn, quien quedó sola durante ocho días en una vivienda de Cleveland (Ohio) mientras Candelario estaba de vacaciones en una isla.
La mujer se declaró culpable en febrero de cargos relacionados con la muerte de su hija. Admitió haber dejado a la niña sola y sin cuidado del 8 al 16 de junio de 2023, mientras ella estaba de viaje en Puerto Rico y Detroit (Míchigan).
Según documentos judiciales, la Policía encontró a la niña “envuelta en mantas sucias” con heces y orina.