El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, realizó su primera entrevista con la televisión estadounidense durante su mandato, abordando temas de gran relevancia como la crisis migratoria, la epidemia de fentanilo, la guerra contra el narcotráfico y las relaciones con Estados Unidos.
Durante su participación en el programa de noticias 60 Minutes de la cadena CBS, López Obrador desestimó las acusaciones de chantaje político hacia la Casa Blanca y defendió la política de seguridad y gestión migratoria de su administración. Destacó la independencia y soberanía de México, rechazando cualquier forma de subordinación a otros países.
La entrevista también sirvió como plataforma para abordar la próxima contienda electoral en Estados Unidos, donde la migración y la lucha contra el narcotráfico son temas cruciales. López Obrador enfatizó la importancia de la relación bilateral entre México y Estados Unidos, independientemente del resultado de las elecciones.
El presidente mexicano fue cuestionado sobre el contraste entre los candidatos presidenciales Joe Biden y Donald Trump, destacando su buena relación con ambos y priorizando el interés general de ambos países.
Además, López Obrador abordó la situación en la frontera con Texas, criticando las políticas antimigrantes del gobernador Greg Abbott. También defendió sus conferencias de prensa diarias y rechazó acusaciones de vínculos con carteles de drogas.
La entrevista, que duró poco más de 13 minutos, concluyó con una breve mención sobre Claudia Sheinbaum, la candidata oficialista a la presidencia, destacando sus altas probabilidades de convertirse en la primera presidenta de México. Este encuentro marcó un hito en la historia del programa, siendo la primera vez que un presidente mexicano es entrevistado en casi seis décadas de historia.
