Eurostar ha desviado sus trenes de alta velocidad entre París y Lille a vías convencionales, aumentando los tiempos de trayecto hasta en una hora y media, y ha cancelado algunos servicios debido a actos de sabotaje en Francia a pocas horas de la inauguración de los Juegos Olímpicos. En un comunicado, la compañía informó que “todos los trenes de alta velocidad desde y hacia París están siendo desviados por la línea clásica”, y que los pasajeros pueden cancelar o modificar sus viajes sin coste adicional.
El primer ministro en funciones, Gabriel Attal, calificó estos actos de sabotaje como “preparados y coordinados”, y destacó sus consecuencias “masivas y graves” en la red ferroviaria. Attal anunció que los servicios secretos y las fuerzas del orden están movilizados para encontrar y castigar a los responsables de estos actos criminales, mientras los equipos de Eurostar trabajan para mantener informados a los pasajeros y garantizar que lleguen a su destino.