Gerardo Fernández Noroña fue designado por el grupo parlamentario de Morena para presidir el Senado durante el primer año de la LXVI Legislatura, una decisión que ha generado fuertes críticas y preocupación entre los senadores del PAN.
A pesar de la oposición, Morena, junto con sus aliados del Partido Verde y el Partido del Trabajo, cuenta con los votos suficientes para asegurar su nombramiento.
Mientras que Ignacio Mier, vicecoordinador de los senadores de Morena, defendió la elección de Fernández Noroña resaltando su preparación y conocimiento, figuras del PAN como Marko Cortés y Lilly Téllez expresaron su descontento.
Cortés calificó la decisión como la elección del “perfil más inadecuado”, mientras que Téllez lo describió como un “pandillero” que encarna lo contrario a la decencia, reflejando la preocupación de la oposición por la imparcialidad en la conducción del Senado bajo su liderazgo.