Muere a los 116 años la persona más anciana del mundo

Tomiko Itooka, la persona más anciana del mundo, falleció a los 116 años en una residencia de ancianos en Ashiya, ciudad del sur de Japón donde residía. Itooka, nacida el 23 de mayo de 1908 en Osaka, fue reconocida como la persona más longeva del planeta tras el fallecimiento de la española María Branyas Morera en agosto de 2024. La noticia fue confirmada por el alcalde de Ashiya, Ryosuke Takashima, quien destacó la inspiración que representó la vida de la mujer para toda la comunidad.

“La señora Itooka nos dio coraje y esperanza a través de su larga vida. Le damos gracias por ello”, expresó Takashima en un comunicado. A lo largo de su vida, Itooka fue testigo de eventos históricos como guerras mundiales, pandemias y avances tecnológicos. Según el comunicado, disfrutaba en su vejez de alimentos como bananas y la bebida láctea japonesa Calpis, y en su juventud practicó voleibol.

Japón, conocido por la longevidad de su población, enfrenta una crisis demográfica marcada por el envejecimiento acelerado de sus habitantes.

En septiembre de 2024, el país contaba con más de 95 mil personas centenarias, de las cuales el 88% eran mujeres. Con casi un tercio de su población mayor de 65 años, el país enfrenta retos sociales y económicos derivados del alto costo de los servicios médicos y una población activa cada vez menor.