Al rendir la Guardia de Honor por el 133 aniversario de Alfonso Reyes, el Rector de la UANL, Santos Guzmán López, destacó la figura que significó el Regiomontano Universal para la Universidad, para México y para el mundo.
En su primera guardia de honor al Regiomontano Universal, el doctor Santos Guzmán López, Rector de la UANL, destacó que Alfonso Reyes ha sido el más grande humanista de Nuevo León y un digno representante ante el mundo.
La ceremonia se realizó en la Facultad de Filosofía y Letras, frente a la estatua de Alfonso Reyes, quien naciera en Monterrey un 17 de mayo de 1889. El doctor Santos Guzmán además agradeció a los artistas e intelectuales que participarán en el Festival Alfonsino 2022.
En la Guardia de Honor también participaron la maestra Ludivina Cantú Ortiz, coordinadora de la Facultad de Filosofía y Letras, y como maestro de ceremonias el poeta José Javier Villarreal Álvarez Tostado, director de la Capilla Alfonsina Biblioteca Universitaria (CABU).
Propulsor de la Universidad con un gran legado
El Rector agregó que Alfonso Reyes es “nuestro héroe cultural más destacado”, y el honrarlo en el día en que se cumplen 133 años de su nacimiento es honrar a “uno de los espíritus tutelares de nuestra universidad”.
Además del “Voto por la Universidad del Norte”, el Rector destacó que los 36 mil volúmenes de la biblioteca de Alfonso Reyes ahora integran el fondo más valioso de la CABU.
“Me corresponde hacer guardia frente a la estatua de Alfonso Reyes por primera vez. Fue el más grande humanista del Siglo XX. Es una tradición en esta casa de estudios que recibió, en su momento, el voto de Reyes para su propia creación”, dijo el Rector.
Alfonso Reyes eligió el futuro
La crítica literaria Liliana Weinberg Marchevsky, Premio Internacional Alfonso Reyes 2021 y quien también participó en la Guardia, dijo que Alfonso Reyes vivió una época turbulenta entre revoluciones y guerras, pero se sobrepuso y eligió el optimismo.
“La muerte de su padre fue un momento decisivo en su vida a partir del cual debió elegir entre un destino trágico, obsesionado por el pasado y la muerte, o un camino de libertad orientado hacia el futuro y respeto por la vida. Optó por el segundo”, dijo.
Precisó que a Alfonso Reyes le tocó vivir en épocas turbulentas. Luego dijo: “piensen esto; asistió al fin del Porfiriato y comienzos de la Revolución Mexicana. Sale a Europa exiliado en vísperas de la Primera Guerra mundial”, recordó.
Después agregó que los trabajos diplomáticos de Reyes se desarrollan en los difíciles años de guerra y posguerra, la guerra civil española y la segunda conflagración mundial, el reacomodo posterior y comienzos de la Guerra Fría.
“El haber elegido entre el encierro eligió la apertura, el optimismo y los proyectos de futuro”, dijo Weinberg.
