Autoridades y organizaciones de Ciudad Juárez, en la frontera norte de México, están en alerta este viernes ante el posible arribo de una nueva caravana de migrantes a la localidad, uno de los principales puntos de cruce hacia Estados Unidos.
La expectativa genera preocupación entre funcionarios y habitantes, dado que los albergues y servicios de apoyo ya operan al límite.
La situación se suma a la crisis migratoria que impacta la región fronteriza, donde miles de personas aguardan una oportunidad para solicitar asilo o cruzar al país vecino.
Kareli Hernández, migrante venezolana, explicó que la reciente elección en su país ha impulsado nuevamente la migración, pues muchos creían que el presidente Nicolás Maduro dejaría el cargo. “Como volvió a ganar, ya todos decidimos avanzar buscando un mejor futuro para nuestros hijos y más estabilidad”, comentó.
El flujo migratorio hacia la frontera continúa en aumento, impulsado por factores como la violencia, la pobreza y desastres naturales en los países de origen, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Además, la incertidumbre por el endurecimiento de políticas migratorias en Estados Unidos tras las elecciones presidenciales, donde se enfrentarán Donald Trump y Kamala Harris, agrava la situación para quienes buscan cruzar.
Juan Fierro, pastor y director del albergue El Buen Samaritano, advirtió sobre la vulnerabilidad de la región ante una posible deportación masiva. “La zona no está preparada para recibir a tal cantidad de personas”, señaló.