Jacob Andrew Mendoza, de 37 años y originario de Coahuila (México), ha sido sentenciado a pasar 35 años en prisión por su participación en el tráfico de metanfetamina para un cártel mexicano, según informó el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE).
Mendoza fue acusado formalmente en diciembre de 2020 por dos cargos de conspiración relacionados con la posesión y distribución de metanfetamina desde México hacia Estados Unidos.
El mexicano fue detenido el 26 de mayo de 2021 en San Ángelo, Texas, y se le atribuye la responsabilidad de suministrar diversas drogas, incluyendo 56.8 kilogramos de metanfetamina con un alto nivel de pureza, así como heroína, cocaína y crack. Mendoza se declaró culpable de los cargos el 17 de octubre de 2022 para evitar un juicio.
El fiscal federal Jaime Esparza para el Distrito Oeste de Texas destacó que Mendoza era un delincuente de carrera y líder de una organización narcotraficante mexicana. Esparza elogió el trabajo de los agentes del HSI, el brazo investigador de ICE, que condujo al arresto de Mendoza.
La condena de Mendoza es parte de los esfuerzos para combatir el tráfico de drogas y proteger a las comunidades de actividades delictivas relacionadas con el narcotráfico.