Fueron varias horas de caos político y enfrentamiento institucional en Perú que acabaron con Pedro Castillo destituido y detenido y con Dina Boluarte como primera presidenta del país.
Castillo fue detenido este miércoles después de que el Congreso de su país lo destituyera por anunciar horas antes la disolución de la Cámara y la instauración de un “gobierno de excepción”.
“El Ministerio Público dirigió esta tarde la detención de Pedro Castillo Terrones por el presunto delito de rebelión, regulado en el artículo 346 del Código Penal, por quebrantar el orden constitucional”, expresó la Fiscalía.
Los eventos se precipitaron después de que el mandatario hiciera el inesperado anuncio, que fue calificado de “golpe de Estado” por representantes de todo el espectro político.
Castillo buscaba evitaruna sesión programada del Congreso en la que debía votarse una moción de vacancia en su contra.
Tras el anuncio de Castillo, el Congreso terminó declarando la vacancia del presidente por “incapacidad moral”, es decir, su destitución, con 101 votos a favor, y decretó que asumiera el cargo la vicepresidenta, Dina Boluarte.
La PNP confirmó en su cuenta de Twitter que Castillo se encuentra en una de sus dependencias en Lima junto a la fiscal Patricia Benavides y otros funcionarios.
“Dando cumplimiento a nuestras facultades y atribuciones descritas en el art. 5 de D.L n.° 1267 Ley la Policía Nacional del Perú, efectivos PNP intervienen al expresidente Pedro Castillo”, informó la institución en un tuit que luego fue borrado.
Las imágenes difundidas muestran a Castillo en la prefectura junto a la fiscal y otros funcionarios policiales y judiciales.
Posteriormente, Boluarte juró como nueva presidenta de la República, la primera mujer en ocupar el cargo en Perú.
En su primer mensaje a la nación, rechazó el “intento de golpe de Estado” por parte de Castillo el cual, dijo, no “encontró eco en las instituciones de la democracia y en la calle”.
“Solicito una tregua política para instalar un gobierno de unidad nacional. Esta alta responsabilidad debe ser asumida por todas y por todos”, aseguró.
“Nos corresponde conversar, dialogar, ponernos de acuerdo, algo tan sencillo como impracticable en los últimos meses. Convoco por ello a un amplio proceso de dialogo entre todas las fuerzas políticas representadas o no en el Congreso”.
Boluarte anunció que su primera medida es iniciar un combate a la corrupción en las instituciones del Estado para lo cual pidió el apoyo de la Fiscalía de la Nación y la Procuraduría para “ingresar sin medias tintas a las instituciones corrompidas”.