Irán ha desatado una ola de misiles y drones contra Israel en respuesta al reciente ataque atribuido a Israel contra su consulado en Siria. La Guardia Revolucionaria confirmó que esta ofensiva, la primera directa contra territorio israelí, fue en represalia al bombardeo del consulado en Damasco el 1 de abril, que resultó en la muerte de siete miembros de la Guardia Revolucionaria.
El gobierno iraní invocó el artículo 51 de la carta de la ONU para justificar su ataque, considerándolo como “legítima defensa” por la agresión sufrida en su legación diplomática. El ministro de Defensa de Irán advirtió que cualquier país que permita ataques contra suelo iraní recibirá una respuesta contundente.
Por su parte, el líder supremo de Irán, Ali Jameneí, ha reiterado la necesidad de castigar al “régimen sionista”. Israel, que anticipaba una represalia iraní, confirmó el lanzamiento de más de 100 drones contra su territorio y cerró su espacio aéreo, medida seguida por Jordania.
Se espera que lleguen más drones en las próximas horas, mientras Israel moviliza aviones para repelerlos. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, convocó de urgencia al Gabinete de Guerra para abordar la situación.
La escalada de tensiones entre Irán e Israel ha alarmado a la comunidad internacional, generando temores de un conflicto más amplio en la región.