León venció 3 goles a 2 a los rojinegros del Atlas en el partido de ida de la Final de la Liga MX en un encuentro que se llevó a cabo en la casa de la fiera.
Mena, dos veces, y el chileno Víctor Dávila, anotaron por el León del entrenador argentino Ariel Holán, mientras el Atlas, comandado por el técnico argentino Diego Cocca, descontó con dianas de Luis Reyes y Julio Furch.
El Atlas salió a presionar en el estadio de su rival y en un descuido de la defensa lo sorprendió en el minuto 11 con un gol de pierna derecha de Reyes en un saque de manos.
León salió en busca del empate y comenzó a echar hacia atrás al rival, pero en el 30 el colombiano Andrés Mosquera sufrió un tirón muscular y seis minutos más tarde salió de la cancha, sustituido por el argentino Ramiro González.
LLEGÓ LA IGUALADA
En el 37 el León empató con una buena combinación. Mena entró por la banda derecha y puso un centro; el chileno Jean Meneses lo interceptó y le dio la pelota a Dávila, quien convirtió de zurda al ángulo.
Meneses y el colombiano William Tesillo dispararon por fuera en par de llegadas del León, que terminó mejor la primera mitad.
El León aumentó el ritmo en el segundo tiempo en el que Mena y Meneses pisaron el área con peligro, el segundo con un disparo al travesaño en el minuto 54.
Atlas aguantó sin renunciar al contragolpe y en el 65 retomó la ventaja con un gol de Furch. El colombiano Julián Quiñones estorbó a la defensa y Furch disparó de zurda con todo a favor.
Cuando el cuadro de Cocca se disponía a cerrar el partido, falló en su punto más fuerte: la defensa.
En el 78 el León retomó la ventaja al sacar provecho del error del guardameta colombiano Camilo Vargas, el segundo en dos partidos; Meneses disparó, el balón le rebotó al portero y Mena lo metió en la red para el 2-2.
La defensa de Atlas, la mejor del campeonato, hizo agua; Aldo Rocha derribó en el área a Dávila y provocó un penalti que convirtió Mena, quien llegó a seis goles en los últimos cuatro partidos para dejar el encuentro 3-2 favor León.
El partido de vuelta se jugará el domingo en el estadio Jalisco, casa del Atlas, donde no hay mañana.