Un contingente de aproximadamente 300 elementos federales llegó a Nuevo León para reforzar los patrullajes, tras el reciente secuestro de miembros de varias familias en la región.
Integrantes del Ejército, la Guardia Nacional y la Fuerza de Tarea Regional se unen en una colaboración con las autoridades locales para combatir la delincuencia organizada.
Se implementarán acciones de prevención, patrullajes y puestos militares de seguridad para inhibir los índices de homicidios y brindar protección a la ciudadanía.
Este refuerzo se produce luego del presunto secuestro de 17 personas de cuatro familias el pasado 29 de marzo, incluyendo menores de edad, en una serie de eventos que siguen a los acontecidos en Culiacán y Mazatlán, Sinaloa, donde 66 personas fueron plagiadas el 22 de marzo.