Las recientes lluvias en Nuevo León han provocado un leve aumento en el nivel de las presas del estado, según el reporte de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). La presa La Boca subió de 36.80% a 36.90%, Cerro Prieto de 5.68% a 5.83%, y El Cuchillo pasó de 32.83% a 33.89%. Aunque los incrementos son mínimos, representan un alivio ante las altas temperaturas causadas por las tres olas de calor que ha experimentado la región.
Además de mejorar ligeramente el almacenamiento de agua, las lluvias ayudaron a controlar incendios en varios municipios. En la comunidad de Los Cuartones, en Santiago, un incendio que afectó 900 hectáreas fue completamente sofocado y el área quedó bajo vigilancia municipal. Asimismo, en el ejido Santa Cruz de Santa Catarina, un incendio que consumió 140 hectáreas también fue controlado en su totalidad.
Protección Civil de Nuevo León informó que estos incendios afectaron principalmente hojarasca y hierba de bosque de encino-pino, arbustos y arbolado pequeño. La intervención de las lluvias ha sido crucial para el control de estos siniestros, brindando un respiro tanto en términos de almacenamiento de agua como en la gestión de emergencias ambientales.
