Un niño de 2 años murió ayer lunes por un golpe de calor tras haber permanecido “durante horas” en un automóvil en Port St. Lucie, en la costa atlántica de Florida, por un presunto olvido de su padre, quien ha sido arrestado, el mismo día en que se reportó récord de temperaturas altas en el sur del estado en el mes de marzo.
La policía de Port St. Lucie informó que el padre del niño, James Fidele, de 37 años, llamó a los servicios de emergencia tras darse cuenta, al cabo de varias horas, de que olvidó sacar a su hijo del automóvil cuando llegó a casa.
Según informes de las autoridades, los primeros rescatistas que llegaron a la casa comenzaron las medidas de salvamento y reanimación antes de transportar al niño a un hospital, donde murió más tarde.
Fidele fue arrestado por el delito de dejar a un niño desatendido en un vehículo, causándole graves daños corporales, un caso que también fue notificado al Departamento de Niños y Familias de Florida.
Con la lectura el lunes de 91 grados Fahrenheit (32,7 grados centígrados) en el Aeropuerto Internacional de Miami (MIA), la marca superó un récord de 88 grados establecido el 6 de marzo de 1965, informó por su parte el Miami Herald.