A sólo un mes de que el Congreso de Nuevo León avalara las reformas a la Ley de Gestión Integral de Residuos el gobernador Samuel García le puso freno.
La aprobación de dicha Ley despertó el enojo del sindicato de Simeprode y despertó protestas en contra de los legisladores llegando al grado de arrojar basura tanto al exterior del recinto legislativo como de los hogares de los políticos.
La Mesa Directiva reportó la llegada de las observaciones del Poder Ejecutivo, las cuales fueron turnadas a la Comisión de Medio Ambiente.
“Escrito signado por el doctor Samuel Alejandro García Sepúlveda, gobernador constitucional del estado de Nuevo León, mediante el cual presenta las observaciones al decreto número 419 que contiene la expedición de la Ley para la Gestión Integral de Residuos”, reportó la secretaria, la priista Gabriela Govea.