Con el asesinato de Isauro Ambrosio Tocohua, presidente municipal de Rafael Delgado, Veracruz, el viernes pasado, suman 62 ediles asesinados en el presente sexenio (20 alcaldes, 31 regidores y 11 síndicos).
A ese crimen se suman los más recientes del pasado 5 de octubre, cuando fue muerto Conrado Mendoza Almeda, alcalde de San Miguel Totolapan, Guerrero, y el del 24 de noviembre, cuando fue asesinado Crispín Hernández Vásquez, alcalde electo de San Pedro Mixtepec, Oaxaca, que obtuvo el cargo mediante el sistema normativo indígena y estaba a un mes de tomar posesión.
De acuerdo con la consultora Etellekt, los asesinados son 20 alcaldes, 31 regidores y 11 síndicos, lo que representa una incidencia 29% superior en comparación con lo registrado en todo el sexenio de Felipe Calderón. De las víctimas, 53 eran hombres y el resto, mujeres.
Los estados con la mayor violencia política son Oaxaca (12 funcionarios municipales asesinados), seguidos de Michoacán, con siete; el Estado de México, siete; Veracruz (siete); Guerrero (cinco); Sonora (tres); Guanajuato (tres) y Chihuahua (tres), así como Chiapas, Jalisco, Puebla, Sinaloa y Morelos, con dos muertos cada uno. En tanto, Baja California, Coahuila, Hidalgo y Tamaulipas registran un asesinato cada uno.
Desde la alternancia política en la Presidencia de la República, hace 22 años, 228 ediles han sido asesinados, de los cuales 96 son alcaldes, 100, regidores y 32 síndicos.
Durante el gobierno del presidente Vicente Fox hubo 11 ediles asesinados (siete alcaldes, tres regidores y un síndico). Con Felipe Calderón la cifra subió a 48 (30 alcaldes, 10 regidores y ocho síndicos). Con Enrique Peña se registraron 107 asesinatos (39 alcaldes, 56 regidores y 12 síndicos), de acuerdo con el recuento de la consultora Etellekt.