El actual proceso electoral en México se ha marcado por la violencia que ha cobrado la vida de 13 aspirantes a presidencias municipales en diferentes estados del país. Debido a estos trágicos eventos, el nombramiento de 8 de esas candidaturas se encuentra detenido, incluso cuando algunas campañas ya han comenzado.
Partidos políticos como Morena, PAN, Movimiento Ciudadano, PRI y el Partido Verde han optado por no postular a nuevos candidatos para ciertas alcaldías en Michoacán, Colima, Puebla, Jalisco, Chiapas y Guanajuato, entre otros estados, como medida de seguridad ante la creciente violencia.
Este preocupante panorama refleja la gravedad de la situación en el ámbito político y electoral del país, destacando que Morena es el partido más afectado por estos trágicos sucesos, con cuatro de las víctimas siendo candidatos de esta agrupación política.
Estos hechos ponen de manifiesto los desafíos y riesgos que enfrenta la democracia en México en medio de un contexto de violencia e inseguridad.