En un giro sorpresivo, la reforma al Poder Judicial de la Federación impulsada por la 4T fue aprobada ayer, después de que la Suprema Corte no lograra invalidarla debido a la falta de una mayoría calificada. El cambio de voto del Ministro Alberto Pérez Dayán fue clave, ya que al unirse a las Ministras afines al Gobierno, impidió que se alcanzaran los ocho votos necesarios para frenar la reforma constitucional, a pesar de los esfuerzos de la presidenta Norma Piña.
La reforma, que establece cambios significativos en la selección de Jueces, Magistrados y Ministros, fue respaldada por Pérez Dayán, quien sostuvo que las acciones legales contra reformas constitucionales son improcedentes. Con su voto, la Corte no logró emitir un pronunciamiento formal sobre la validez de los cambios, y la reforma avanzó a pesar de las propuestas de anulación parcial de algunos puntos, como la elección popular de los Jueces.
La decisión causó gran malestar entre los trabajadores del Poder Judicial, quienes realizaron protestas frente a la Corte, calificando el día como “de luto” para el país. Por su parte, el Ministro Luis María Aguilar lamentó no haber logrado una mayor solidaridad en la Corte, mientras el gobierno celebra la victoria legislativa.