Las defensas antiaéreas de Ucrania interceptaron con éxito un ataque masivo de drones lanzados por Rusia contra Kiev durante la noche del domingo. Alrededor de 50 drones, en su mayoría modelos Shahed de fabricación iraní, fueron disparados hacia diversas regiones del país, incluidas Cherkasi, Poltava y Cherniguiv. En la capital, las fuerzas ucranianas derribaron más de una docena de drones, evitando víctimas o daños materiales significativos, según Sergui Popko, jefe de la Administración Militar de Kiev.
En paralelo, el Ejército ucraniano informó la destrucción de una estación de radar rusa en Kursk, clave para las operaciones del sistema de misiles S-400. Este movimiento se suma a las recientes ofensivas ucranianas en áreas fronterizas. Mientras tanto, Rusia reportó la interceptación de 36 drones ucranianos en cinco regiones, destacando la creciente escalada de ataques a lo largo de la frontera entre ambos países.
La situación refleja un recrudecimiento en los enfrentamientos, con un intercambio constante de ataques aéreos. Ucrania sigue mostrando su capacidad para resistir y neutralizar amenazas, mientras busca debilitar las capacidades militares de Rusia en zonas estratégicas.
