Una niña de un año murió ayer lunes en California luego de recibir un disparo accidental por parte de su hermano, tan solo dos años mayor que ella.
Durante la mañana la Policía local recibió una llamada para reportar disparos en una casa en Fallbrook, un suburbio al norte de San Diego, según informó la oficina del sheriff del condado de San Diego, al sur de California en un comunicado.
Cuando los agentes de Policía llegaron al lugar de los hechos, encontraron que los disparos habían sido provocados por un niño de tres años que consiguió tener acceso a un pistola que no tenía seguro y disparó “accidentalmente” en la cabeza hermana menor.
La policía no ha revelado el nombre del menor fallecido “por respeto a la familia y por ser menor de edad”, según indicó la oficina del sheriff en un comunicado.
A su vez, las autoridades informaron que han abierto una investigación para esclarecer “con más detalles” la causa de la muerte. California es uno de los estados con mayores restricciones al porte de armas, permitido para los mayores de 21 años.
Esta no es la primera vez que ocurre una situación de este tipo en Estados Unidos. En el 2021 una mujer murió en su casa después de que su hijo le disparó y todo sucedió mientras ella estaba en una conferencia de trabajo por la plataforma Zoom.
Shamaya Lynn de 21 años estaba en la conferencia de Zoom cuando recibió un disparo, dijo la Policía de Altamonte Springs en un comunicado.
El video del incidente no se hizo público y la policía aseguró los dispositivos donde se presenció la muerte de Shamaya.
En el momento en que Lynn recibió el disparo, las personas que acompañaron la conferencia alertaron al 911 cuando cayó hacia atrás en su silla.
El niño apareció de fondo y los participantes comenzaron a teorizar si el fuerte ruido se había tratado de un disparo. Los agentes de la policía y paramédicos llegaron hasta la casa y aunque atendieron a la mujer, quien tenía un disparo en la cabeza, no pudieron hacer nada por ella.
