Un hombre que tiene raíces mexicanas se encuentra angustiado porque su tiempo se le acaba; será ejecutado el próximo 28 de febrero tras ser condenado por dos asesinatos que, según él, no cometió.
Se trata de Iván Cantú, quien nació en Dallas, Texas y es hijo de un hombre mexicano.
Iván, quien no habla español, sólo inglés, fue condenado a muerte en octubre de 2001, informó el medio Telemundo.
“Desde el primer día […] estaba todo para investigar el caso y probar mi inocencia. Pero cuando lo expliqué no me creyeron”, se lamenta Cantu a Noticias Telemundo en el corredor de la muerte de la prisión Allan B. Polunsky, en West Livingston.
Y agrega: “A menudo pienso en eso porque no me quiero morir, sólo faltan días para que quieran ponerme en una camilla (para recibir la inyección letal) por un crimen que no cometí. Estamos haciendo todo lo posible para presentar la información a las cortes, pero es como si no les importara”.
El hombre fue hallado culpable del asesinato de su primo, James Mosqueda, de 27 años; y de Amy Kitchen, la prometida de Mosqueda, de 22 años. Cantu tenía 28 años en ese entonces.
La pareja fue abatida a tiros en el dormitorio de su casa en el norte de Dallas el 3 de noviembre de 2000, según se determinó en la sentencia.
“Y ahí es cuando te dicen que esas personas en el jurado votaron y llegaron a un acuerdo para querer ejecutarte. Mi corazón dio un vuelco, literalmente estaba en shock”, dijo al medio Telemundo.
Iván refiere que la Fiscalía no investigó bien su caso y hubo testigos con declaraciones falsas.
“Debo hacer todo lo que pueda para mantener mi cabeza ocupada y funcionando, ya sea escribiendo cartas, leyendo libros o estando al tanto de mi caso para evitar que mi mente se deteriore y ayudar a mi equipo a desentrañar mi condena errónea y volver a casa”.
Matt Duff lanzó en 2020 su podcast Cousins by blood sobre el caso de Cantú.
“La mayor parte de las acusaciones provinieron de su novia en ese momento, Amy Boettcher”, dijo Duff a Noticias Telemundo.
“Su versión fue tomada como un hecho por la corte. Pero su historia me parecía ridícula. Con el tiempo, hemos podido demostrar que la testigo estrella del estado dio un testimonio fraudulento”, asevera.
Su caso ha llamado la atención del público y celebridades; miles de personas han firmado una petición online para su liberación.
