Habitantes de Chiapas han denunciado a través de redes sociales la creciente presencia de retenes en diversas carreteras y vialidades del estado, algunos operados por personas con uniformes falsos de corporaciones policiales o militares.
Estas denuncias señalan que los retenes, instalados por grupos criminales, han incrementado la inseguridad en la región, especialmente en áreas donde el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación se disputan el control del tráfico de drogas, migrantes, extorsiones y trata de personas, particularmente en la frontera con Guatemala.
Ante esta situación, el gobernador Rutilio Escandón ha señalado que la responsabilidad de combatir a estos grupos recae en las autoridades federales, no en la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana estatal.
Sin embargo, usuarios de plataformas como Facebook, X y TikTok han reportado que las carreteras de Chiapas están tomadas por estos grupos, lo que agrava la inseguridad y dificulta la circulación segura en caminos como los de Pantelhó, Amatenango del Valle, El Parral, La Concordia, Ocozocoautla y Villa de Rosas.
Organizaciones sociales y empresariales han solicitado sin éxito que las autoridades locales incrementen su presencia en estas áreas.
La falta de respuesta ha contribuido al aumento de la “cifra negra” de delitos como robos y extorsiones, debido a la desconfianza de las víctimas para denunciar, temiendo la posible complicidad de las autoridades con los grupos delictivos.
