Las diosas mexicanas del agua culminaron su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024 con un histórico séptimo lugar, superando el octavo puesto obtenido en Atlanta 1996. En su despedida, el equipo rindió tributo a Matlalcueye, diosa del agua, con una rutina acrobática vibrante y energética que fue aplaudida por el público en el Centro Acuático. Lideradas por Nuria Diosdado y con la participación crucial de Jessica Sobrino en los elementos acrobáticos, las mexicanas sumaron un total de 853.7932 puntos, destacándose especialmente en la rutina acrobática.
Este logro marca el regreso de México a la élite de la natación artística después de 28 años, compitiendo en un deporte tradicionalmente dominado por Europa y Asia. Con una sumatoria que las posicionó séptimas en la general, las mexicanas demostraron su capacidad y resiliencia en una disciplina que exige precisión y coordinación extrema. En la competencia, China se llevó el oro, Estados Unidos la plata y España el bronce.
