Debido que al menos el 20 por ciento de las poco más mil 100 colonias de Monterrey requieren atención en sus vialidades internas, el Gobierno de la ciudad emprendió un programa de reparación de carpeta asfáltica dañada.
El secretario de Infraestructura Sostenible, Guillermo Hernández Ramírez, aclaró que en las reuniones vecinales que se sostienen cada semana, se ha comprobado la necesidad de atender colonias que no han tenido mantenimiento en sus calles, como las del norponiente y del cuadro que comprenden las avenidas Félix U. Gómez, Churubusco, Colón y Ruiz Cortines.
“El rezago en el mantenimiento al interior de las colonias es amplio, es un rezago grande y entonces vamos a avocar gran parte de nuestro presupuesto para abatir ese rezago y para rehabilitar las calles locales hacia el interior de las colonias para responder al llamado de las personas” aclaró el funcionario.
Adelantó que se realiza un censo para determinar la cantidad de metros cuadrados que necesitan intervenciones como bacheo, recarpeteo o rehabilitación.
ATIENDEN VARIOS SECTORES
Dijo que se hizo un sondeo rápido, por lo que ya se atienden calles de Cumbres, y en breve acudirán a Valle Verde segundo sector, Valle de Infonavit y Cedros, entre otras.
De cualquier forma, el estudio continuará para determinar las áreas más afectadas, el tipo de obra que requieren y el presupuesto que se gestionará para su atención.
Al momento, esta secretaría ha recarpeteado 14 mil metros cuadrados, y espera atender otros 20 mil metros cuadrados en lo que resta del mes.
Hernández Ramírez estimó que para estos trabajos se requerirán entre 300 y 400 millones de pesos por año y que una vez que arrancan las labores en las calles, dependiendo del daño, éstos pueden llevar de 10 a 20 días.
Explicó que normalmente el bacheo que hace Servicios Públicos es en áreas pequeñas, de menos de cuatro metros cuadrados con daños superficiales; y las de Infraestructura Sostenible se aplican en calles agrietadas, con hundimientos, ondulaciones, y carpeta cuarteada, e incluso con daños estructurales.
De cualquier forma, un trabajo en la superficie de rodamiento bien hecho, basado en las normas de la Ley de Pavimentos de Nuevo León, debería tener una vida útil de hasta 15 años.
