El Ejército de Nepal ha lanzado una campaña para recoger toneladas de basura y recuperar cadáveres en el Monte Everest y otras dos cumbres del Himalaya, mientras comienza la temporada de escalada en la montaña más alta del mundo.
El general de brigada Sanjaya Deuja, director de la campaña, señaló que el propósito es recoger diez toneladas de desechos sólidos del Everest, el Lhotse y el Nuptse, además de recuperar al menos cinco cadáveres de la montaña.
La iniciativa, en su quinta edición y que concluirá el 5 de junio, busca proteger el medioambiente y la belleza de la montaña, teniendo en cuenta que los glaciares del Himalaya alimentan ríos importantes como el Ganges y el Indus.
Doce miembros del Ejército nepalí y 18 guías o sherpas participarán en la misión, que busca abordar el creciente problema de la contaminación en la zona, provocada en parte por los residuos dejados por los montañeros.
El Gobierno de Nepal ha emitido un número récord de permisos para escalar el Everest en los últimos años, lo que ha llevado a un aumento en la cantidad de basura dejada en la montaña.
Además de los desechos, la campaña también aborda la cuestión de los cadáveres que quedan en la montaña, muchos de los cuales resurgen cada primavera con el deshielo.
Retirar los cuerpos del Everest es un proceso costoso y peligroso debido a los riesgos de la alta montaña, pero el Ejército nepalí ha logrado recuperar varios cadáveres en campañas anteriores.
Desde 2019, se han recogido 108 toneladas de desechos y se han recuperado ocho cadáveres de diferentes montañas, principalmente del Everest.