El Servicio Secreto de Estados Unidos ha incorporado perros robot, como el modelo ‘Spot’ de Boston Dynamics, para proteger al presidente electo Donald Trump en su residencia de Mar-a-Lago, Florida. Equipados con tecnología de vigilancia avanzada y sensores especializados, estos robots patrullan las inmediaciones del club privado, garantizando la seguridad en el entorno.
‘Spot’, identificado con los colores negro, blanco y rojo, lleva inscrito “USSS TSD”, siglas de la División de Seguridad Técnica del Servicio Secreto, y la advertencia “No acariciar”. Según la agencia, estos dispositivos no solo apoyan en investigaciones criminales, sino que también forman parte del programa ASTRO, que busca integrar sistemas autónomos en operaciones de protección.
Este robot, valorado en 75,000 dólares, mide cerca de 1.20 metros de largo y alcanza una velocidad de 1.50 metros por segundo. Desde su lanzamiento, diversas entidades han utilizado ‘Spot’, consolidándolo como una herramienta eficaz tanto en el ámbito gubernamental como en el privado.
