Un juez federal quitó la prisión domiciliaria a Gilda Margarita Austin, madre del exdirector de Pemex, Emilio Lozoya.
La mujer, de 75 años, permaneció más de tres años bajo arresto domiciliario, por su presunta responsabilidad en asociación delictuosa y operaciones con recursos de procedencia ilícita, cargos relacionados al caso Odebrecht.
Bajo el argumento de que los adultos mayores tienen derecho a vivir una vida plena e independiente, y libre de violencia, el juez de Control del Centro de Justicia Penal Federal del Reclusorio Norte determinó levantar a Austin y Solís la prisión domiciliaria.
La madre de Emilio Lozoya ya podrá salir de su domicilio, pero no podrá abandonar el país. Asimismo, deberá utilizar un brazalete electrónico y contará con vigilancia personal y afuera de su residencia.