Luis Cresencio Sandoval, titular de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), informó que 10 militares murieron y 35 más resultaron heridos tras la recaptura el jueves del líder el Cártel de Sinaloa, Ovidio Guzmán López, en una localidad de Culiacán.
En la conferencia matutina de Palacio Nacional, el secretario de la Defensa Nacional dio el parte de las acciones que derivaron en la recaptura del hijo de Joaquín Chapo Guzmán, quien ya se encuentra en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1 Altiplano -conocido también como el penal de Almoloya-, ubicado en Estado de México.
“Diez militares perdieron la vida en el cumplimiento de su deber, en aras de garantizar la seguridad de la ciudadanía y del pueblo sinaloense. El Estado mexicano brindará todo el apoyo a los deudos, realizando los honores fúnebres de conformidad a lo establecido en el ceremonial militar”, expuso.
“35 militares se encuentran lesionados por arma de fuego, a quienes se les está brindando la atención médica hospitalaria. Hasta el momento no se tiene información de ningún civil inocente que haya perdido la vida”, apuntó.
Además, también murieron 19 presuntos delincuentes, además de que fueron detenidas 21 personas en el operativo del jueves.
DESCOMISOS
En cuanto al armamento, fueron decomisados 4 fusiles Barret calibre .50, 6 ametralladores calibre .50 y 7.62, 26 armas largas, 2 cortas, 111 cargadores abastecidos con cartuchos de diferentes calibres, 595 cartuchos de diferentes calibres, 2 chalecos antibalas, 13 autos asegurados y 40 vehículos inutilizados (26 blindados).
También fueron asegurados un total de 1.4 kilos de mariguana, 15 gramos de cocaína y seis bolsas con pastillas de fentanilo.