El gobernador de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, admitió la severidad de la crisis de seguridad en el Pacífico, señalando que no hay claridad sobre cuándo podría concluir.
Durante una reunión con diputados de Morena, Rocha Moya destacó que, aunque los índices de violencia han disminuido en las últimas semanas, la situación sigue siendo preocupante y no es momento de declarar victoria.
El mandatario subrayó que tanto el gobierno estatal como el federal están trabajando en conjunto para hacer frente a la violencia, mencionando el apoyo continuo de la presidenta Claudia Sheinbaum.
Rocha Moya también reconoció la complicada situación que enfrenta Sinaloa debido a los enfrentamientos entre grupos delincuenciales vinculados a “La Chapiza” y “La Mayiza” en su disputa territorial.
Por último, Rocha Moya optó por no opinar sobre la investigación del asesinato de Héctor Melesio Cuén, exrector de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), dejándolo en manos de la Fiscalía General de la República.